Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.

Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.
Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.

jueves, 27 de febrero de 2014

Bajo las condiciones de tu atmósfera

Bajas temperaturas en fin de semana

60 grados bajo cero,

fuertes vientos se aproximan

que provocaran enormes silencios

se cree que habrá tormenta eléctrica

entre la ausencia y el total destierro,

terminando finalmente por congelar sueños.

Se pronostican inundaciones en la parte baja

del ojo izquierdo,

la humedad relativa podría alcanzar fuertes nudos

en la esquina,

obstrucción total y un torrente de chubascos

en la parte interna del tragadero evitaran

que la voz emita al menos

un te quiero.

Fuertes ausencias causaran lluvia de recuerdos

se acrecentarán los deseos de verse en sus ojos,

en algunas horas se esperan sequías

que provocarán fuertes grietas en los labios,

(extrañan sus besos)

se espera una tormenta de verbos conjugados

que no lograrán calmar las ansias de escribir versos

y tampoco la inundación de anhelos

de tenerle a su lado.

El cielo será protagonista de fuertes acentos

se esperan vientos cargados de suspiros, miradas interminables

que llevan consigo grandes quimeras

que al final del día terminarán comiéndose los sueños.

Se recomienda leer poesía.

Aquí el clima sigue siendo el mismo:

se te ama todavía.

 

 

Ingrid Ortez.






 

 

 

 

2 comentarios:

  1. precioso poema atmosférico, me ha encantado, me he acordado de un verso de luis brea que habla de la superación de una ruptura amorosa: "hoy las isobaras señalan algunos soles"

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    1. No lo conocía, lo he buscado y me ha encantado. Gracias.

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