Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.

Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.
Se deja de querer, y es como el ciego que aún dice adiós, llorando, después que pasó el tren.

martes, 17 de febrero de 2015

Prometo

Si me rescatas

del frío,

prometo abandonar

el invierno

para siempre... 


Ana Vega.




3 comentarios:

  1. yo tengo una de albert camus, fantástica también: en las profundidades del invierno realmente aprendí que en mi interior habitaba un verano invencible

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    1. Me gusta. Gracias, al final encontraremos ese calor y no se podrá resistir a llegar :)

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  2. “En medio del odio, me pareció que había dentro de mí, un amor invencible. En medio de las lágrimas, me pareció que había dentro de mí, una sonrisa invencible. En medio del caos, me pareció que había dentro de mí, una calma invencible. Me di cuenta, a pesar de todo, que… En medio del invierno, me pareció que había dentro de mí un verano invencible. Y eso me hace feliz. Porque dice que no importa lo duro que el mundo empuje en contra mía, dentro de mí, hay algo más fuerte, algo mejor, empujando de vuelta.”
    Albert Camus lo escribió para ti..

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